Finca rústica en Campanet
650.000 €
Entre el pintoresco pueblo de Campanet y la tranquila pedanía de Ullaró, se encuentra Son Jans, una extraordinaria finca mallorquina del siglo XVII, cargada de historia y carácter. En sus orígenes ya existía aquí un horno de tejas del siglo XVII, todavía conservado, que añade un toque único a esta propiedad.
La finca de 541 m² construidos sobre una parcela de 861 m², cuenta con:
6 dormitorios (uno en planta baja, cuatro en el primer piso y uno independiente en el jardín)
2 baños
Amplio salón-comedor con chimenea
Cocina independiente
Gran sala polivalente, antigua cochera de carros, ideal para convertir en sala de eventos, taller, estudio o alojamiento complementario
En el exterior, la vivienda dispone de un jardín con encanto, donde encontramos una sala utilizada como despacho, justo encima del histórico horno de tejas. Además, una caseta con barbacoa ofrece el espacio perfecto para disfrutar de comidas al aire libre en cualquier época del año.
Gracias a su ubicación estratégica en el antiguo camino real entre Palma y Alcúdia, Son Jans fue durante siglos lugar de descanso para viajeros y comerciantes. Más recientemente, ha funcionado como parador rural, ofreciendo a sus huéspedes la tranquilidad del campo mallorquín y una localización inmejorable. Hoy, su acceso cercano a la autopista Palma–Alcúdia la conecta con el aeropuerto de Palma en 30 minutos, y las playas del norte (Muro, Alcúdia o Pollença) en apenas 20 minutos, así como el campo de Golf de Aucanada.
A tan solo 2 km del centro de Campanet, esta propiedad se encuentra en una zona de gran belleza, a los pies de la Sierra de Tramuntana (Patrimonio Mundial de la UNESCO). Campanet conserva todo el encanto de los pueblos auténticos de Mallorca: calles empedradas, plazas con vida local, y un entorno natural perfecto para los amantes del senderismo, el ciclismo o la tranquilidad rural. Muy cerca se encuentran lugares emblemáticos como las Cuevas de Campanet, Ses Fonts Ufanes, la Iglesia de Sant Miquel y el Monasterio de Lluc.
Son Jans mantiene gran parte de los elementos arquitectónicos originales: muros de piedra, arcos de marés, cornisas talladas y espacios amplios que conservan la esencia de la Mallorca tradicional.
Es una propiedad con historia, alma y posibilidades infinitas: ideal como vivienda familiar con carácter, proyecto hotelero rural o residencia vacacional exclusiva.
Una finca que no se puede describir: hay que verla para entender su magia.
No tiene cédula de habitabilidad.
Llámanos y estaremos encantadas de coordinar una visita contigo.